martes, diciembre 28, 2010

Clamor por la Vida de los Inocentes. Declaracion de la Iglesia. Aborto.

Autor: Los Obispos de la Conferencia Episcopal de Chile
Fecha: 28/12/2010
Pais :Chile
Ciudad: Santiago
Ref. Cech: 345 / 2010
Clamor por la Vida de los Inocentes
Declaración de los Obispos de la Conferencia Episcopal de Chile
En el día de los Santos Inocentes,
28 de diciembre de 2010.

1. En estos días en torno a Navidad, en que nos alegramos con la celebración del nacimiento del Señor  Jesús, en nuestro país surgen nuevamente voces de algunos legisladores que proponen despenalizar el  aborto en determinados casos; por ejemplo, cuando el embarazo pone en  riesgo  la vida de  la madre o  atenta gravemente en contra de su salud, en casos en que el embarazo es producto de una violación, o  bien cuando el concebido que se desarrolla en el vientre materno posee malformaciones, que incluso se  prevé que lo llevarán a la muerte una vez nacido. 
2. Frente a estas situaciones, ninguna postura ni decisión es neutral, ni puede serlo. Como pastores de la  Iglesia Católica  y a partir de  su enseñanza,  con  caridad en  la  verdad, queremos ofrecer  luces para el  discernimiento en conciencia de los católicos y de todas las personas de buena voluntad; también como  un aporte a  la reflexión de  los  legisladores y autoridades ante un  tema que  toca profundamente el alma  nacional, como es el elemental derecho a la vida.
3. Ciertamente,  las  situaciones  a  las  que  se  refieren  estos  proyectos  de  ley  son  muy  dramáticas  y  dolorosas  tanto para  la madre como para  las personas cercanas a ella, y no se suele estar preparado  para vivirlas. El sentimiento de dolor que experimenta una madre y su familia al saber que el propio fruto  de la concepción implica un peligro para su vida, que el hijo que espera con tantas ansias viene con una  malformación grave, o que el ser humano que se gesta en su seno es el  fruto de una violación; es un  sentimiento  que  hay  que  comprender  y  debe  constituir  una  gran  preocupación  para  la  familia,  los  servicios de salud y por cierto también en la propia comunidad cristiana. Situaciones como éstas, aunque  escasas, son fuentes de angustia, incertidumbre y dolor que a nadie pueden dejar indiferente.
4. Ante tales situaciones, la pregunta es cómo responder de la mejor manera para ser respetuosos con la  vida, tanto de la madre como la de su hijo, logrando que la respuesta del marco jurídico, de los servicios  de  salud  y  de  la  sociedad  entera  refleje  un  hondo  respeto  al  derecho  a  la  vida  que  tiene  cada  ser  humano.  Al mismo  tiempo  nos  eduque  a  todos  en  los  valores  humanos  fundamentales  que  están  en  juego, como son el respeto a la vida, el cuidado del más débil, así como la solidaridad, la compasión y la  justicia.  Consideramos  que  éstas  son  las  cuestiones  que  hay  que  poner  en  la  discusión.  Pues  las  respuestas que demos como sociedad y país marcarán la vida de la madre y del hijo, como asimismo el  alma nacional y la cultura que vamos construyendo.
5. El  Papa  Juan  Pablo  II,  explicando  el mandamiento  “no matarás”, manifestó  nuestra  convicción  con  estas palabras: “Confirmo que la eliminación directa y voluntaria de un ser humano inocente es siempre  gravemente  inmoral”  (Evangelium  vitae, 57). Este principio  ético,  profundamente humano  y  anterior  al  cristianismo, vale con toda razón cuando hay que proteger la vida del ser humano que aún no ha nacido y en consecuencia rechazar la legalización del aborto.
6. Pensamos que, en un embarazo en el cual  la vida o  la salud de  la madre corre peligro, no es  lícito  eliminar la vida del niño concebido. Desde la perspectiva de lo más propio de la medicina, que es sanar,  curar y nunca dañar, y compartiendo el pensamiento de Pío XII, consideramos que “es erróneo poner el  asunto con esta alternativa: o la vida del niño o aquella de la madre. No, ni la vida de la madre ni la del  niño pueden ser objeto de un acto de directa supresión. De una parte como de  la otra  la exigencia no  puede ser más que una: hacer  todo esfuerzo por salvar ambas vidas,  la de  la madre y  la del niño”. Las  prácticas abortivas son  la negación misma de  lo que se entiende por un acto médico, que consiste en  hacer el bien posible, en este caso, a sus dos pacientes: la madre y su hijo. Nunca será un acto médico  el que dañe directamente a cualquiera de ellos. 
7. Ello no se opone, sin embargo, a considerar lícitas las acciones terapéuticas necesarias en favor de la  madre para  sanarla de una enfermedad, aunque comporten un  riesgo,  incluso  letal, para el ser que no ha  nacido.  No  se  debe  confundir  una  acción  terapéutica  a  favor  de  la  madre,  que  encierra  como  consecuencia no buscada el peligro de una pérdida, con la directa eliminación del ser que no ha nacido.
8. En  relación a despenalizar el aborto, cuando se puede predecir con probabilidad o subjetiva certeza que el niño nacerá con un defecto o enfermedad, hay que  tener presente que  la eliminación de un ser humano no  constituye  terapia alguna puesto que no  sana a nadie. Se  trata de un aborto directo  ilícito  desde el punto de vista moral y gravemente contrario al ordenamiento  legal y constitucional de nuestra  nación.
9. A  veces  se  invoca  el  derecho  de  la mujer  a  disponer  de  su  cuerpo. Con  ello  se  olvida  que  el  ser  humano que está en su seno no es parte de ella: es otro ser humano distinto al padre y a la madre. Por  otra  parte,  los  sentimientos  de  la  madre  que  son  invocados,  ciertamente  son  respetables  y  muy  atendibles. Pero nunca un sentimiento puede prevalecer como un valor superior por sobre el derecho a la  vida que tiene todo ser humano, ya sea que esté sano o enfermo. Entre los derechos humanos, éste es  el primero, sin el cual no existen  los demás. Este derecho a  la vida  también se  le ha de respetar al ser  inocente que ha sido concebido como consecuencia de un acto tan violento y condenable como lo es una  agresión sexual.
10. Creemos que el nivel de desarrollo de una comunidad se mide por la capacidad que tiene de hacerse  cargo de los débiles y enfermos. Una sociedad que los elimina permite que la violencia se constituya en  el método para  resolver  los conflictos, convirtiéndose en una dictadura donde  los más  fuertes  terminan  decidiendo por los más débiles. Nadie tiene derecho a arrogarse el poder de decidir qué vida merece ver la luz del día y cual no.
11. Resulta más  razonable preguntarse en qué medida podemos  todos generar  instancias capaces de  acompañar adecuada y efectivamente a la madre y su familia, con ayuda sicológica, social, económica y  espiritual.  Invitamos  a  los  profesionales  del  área  de  la  salud  a  buscar  y  ofrecer  caminos  ante  estas  situaciones que no signifiquen  la destrucción deliberada de  la misma vida sino su cuidado. Hay muchas  experiencias conmovedoras de instituciones que se dedican al servicio de cuidar la vida de los pequeños, los  sufrientes,  los más  pobres  y  abandonados  de  la  sociedad. Ellas merecen  nuestra  gratitud  y  abren  camino a otras iniciativas que pueden surgir. 
12. Confiamos que en estos días en que los cristianos del mundo entero y -en cierta medida- el conjunto  de  la  sociedad  estamos  celebrando  el  nacimiento  del Niño  Jesús,  se  acreciente  en  todos  nosotros  el  amor por la vida, el respeto a la vida de todos y -en especial- el deber de todos de cuidar la vida de los  pequeños,  los  sufrientes  y  los más pobres  y abandonados de nuestra  sociedad. De un modo especial  invitamos  a  orar  por  las  madres  que  viven  estas  situaciones  tan  dramáticas  y  difíciles.  Y  también imploramos para que la sabiduría y fortaleza de Dios guíen las decisiones en tan trascendente materia.  
Presentamos estas intenciones al Padre Dios, por intercesión de la Virgen María, que trajo a este mundo  al Autor de la vida y nos enseña a amarlo.
Los Obispos de la Conferencia Episcopal de Chile
Mons. Ricardo Ezzati Andrello, Arzobispo Electo de Santiago, Presidente de la CECh
Mons. Alejandro Goic Karmelic, Obispo de Rancagua, Vicepresidente de la CECh
Cardenal Francisco Javier Errázuriz Ossa, Administrador Apostólico de Santiago
Mons. Gonzalo Duarte García de Cortázar, Obispo de Valparaíso 
Mons. Santiago Silva Retamales, Obispo Auxiliar de Valparaíso, Secretario General de la CECh 
Mons. Héctor Vargas Bastidas, Obispo de Arica 
Mons. Marco Antonio Órdenes Fernández, Obispo de Iquique 
Mons. Pablo Lizama Riquelme, Arzobispo de Antofagasta
Mons. Guillermo Vera Soto, Obispo de Calama
Mons. Gaspar Quintana Jorquera, Obispo de Copiapó
Mons. Manuel Donoso Donoso, Arzobispo de La Serena
Mons. Luis Gleisner Wobbe, Obispo Auxiliar de La Serena 
Mons. Jorge Vega Velasco, Obispo Prelado de Illapel
Mons. Cristián Contreras Molina, Obispo de San Felipe
Mons. Cristián Contreras Villarroel,  Obispo Auxiliar de Santiago
Mons. Andrés Arteaga Manieu, Obispo Auxiliar de Santiago 
Mons. Fernando Chomali Garib, Obispo Auxiliar de Santiago 
Mons. Juan Ignacio González Errázuriz, Obispo de San Bernardo 
Mons. Enrique Troncoso Troncoso, Obispo de Melipilla 
Mons. Horacio Valenzuela Abarca, Obispo de Talca
Mons. Tomislav Koljatic Maroevic, Obispo de Linares
Mons. Carlos Pellegrin Barrera, Obispo de Chillán
Mons. Pedro Ossandón Buljevic, Obispo Auxiliar de Concepción 
Mons. Felipe Bacarreza Rodríguez, Obispo de Santa María de Los Ángeles 
Mons. Manuel Camilo Vial Risopatrón, Obispo de Temuco 
Mons. Francisco Javier Stegmeier Schmidlin, Obispo de Villarrica, 
Mons. René Rebolledo Salinas, Obispo de Osorno, 
Mons. Ignacio Ducasse Medina, Obispo de Valdivia 
Mons. Cristián Caro Cordero, Arzobispo de Puerto Montt 
Mons. Juan María Agurto Muñoz, Obispo de Ancud 
Mons. Luis Infanti de la Mora, Obispo Vicario Apostólico de Aysén 
Mons. Bernardo Bastres Florence, Obispo de Punta Arenas 
Mons. Juan Barros Madrid, Obispo Castrense de Chile 

1 Comments:

Blogger Julio alfonso balbontin garnica said...

esto hay que dejarlo al "libre albeldrío" y no hay otra opción realmente válida cuando solamente YO sé lo que estoy haciendo, asi como Mi Hacedor.

29 diciembre, 2010 00:51  

Publicar un comentario

<< Home