lunes, junio 25, 2007

La Unidad Democrata Cristiana...JDC Stgo Centro.

Hace años que nuestro Partido no es lo que era antes y siempre estamos lamentándonos por aquello, como diría el Vicepresidente Nacional el Diputado Jorge Burgos; desde el más humilde militante hasta el más connotado parlamentario que obtiene la mayoría más alta en su región. Todos hemos dicho en alguna ocasión que la Democracia Cristiana, no es lo mismo; no tan sólo por obtener una menor cantidad de votos en cada elección desde el año 97, extrañamente en las dos últimas hemos tenido un repunte pero nada que sobresalga de la media.
Creí, sin ningún reproche cuando fui a las urnas hace algún tiempo y voté en las internas de nuestro Partido, cuando se me habló de que no sería lo mismo de siempre, pero no se que ha pasado. Al parecer nuestro Partido está condenado a que nosotros mismos nos esforcemos por que seamos tratados de manera peyorativa por el común de los chilenos.
Tengo una gran certeza, que dentro de toda tienda política como la decé debe existir una disciplina partidaria, es más con mayor convicción digo que sin aquella disciplina cualquier partido es mejor que se vaya para la casa y re piensen su actuar si no son capaz de alinear a cada uno de sus militantes. Pero para Alcaldes, Concejales, Diputados y Senadores, quienes deben responderle a la ciudadanía, es una dualidad que les puede jugar en contra.
El mandar a Tribunal del Partido a Zaldívar es la peor vía que pudieron escoger, no hablo en términos jurídicos, ni sentimentalismos de ningún tipo. Seamos pragmáticos, si quienes mandaron a Zaldívar a Tribunal por faltar acuerdos internos lo tradujeron en indisciplina algo que es inaceptable y como consecuencia de esa indisciplina cause algún tipo de división, el simple hecho de hacer eco a los actos del Senador colorín es una muestra hacia la ciudadanía que insistimos en fraccionarnos, detrás de dos o tres líderes, pero que al final del día solo es nocivo para la gran familia democratacristiana.
Recordemos a referentes y profesores como: Don Eduardo Frei Montalva, Don Radomiro Tomic, Don Jaime Castillo Velasco, nunca siguieron aquellos ejemplos y hoy por hoy los miramos como grandes lideres, y permítanme de calidad mundial.