“LA DC TIENE UN DÉFICIT DE LIDERAZGO"..C. HUNEEUS

El analista no ve a la actual presidenta de la colectividad, Soledad Alvear, como candidata de la Concertación. A su juicio, le falta carisma. También critica a Adolfo Zaldívar por no precisar los famosos cambios al modelo de que tanto habla, y dispara sobre la tecnocracia oficialista que ha sido colonizada por la ideología n–Y en los conflictos grandes, ¿la guerra entre colorines y alvearistas en la DC tiene un trasfondo más allá del fraccionamiento propio del partido?
–No, creo que hay diferencias de liderazgo y apreciación respecto al proceso, porque diferencias sustantivas no se ven. El senador Zaldívar ha enfatizado varias veces críticas al modelo económico y no me queda claro cuáles son esas diferencias.
–¿Encuentra inconsistente la crítica de Zaldívar al modelo?
–No digo que sea poco consistente, sino que no la ha formulado. Él tiene que definir bien de qué se trata, y enseguida ofrecer alternativas de discusión para llevar adelante una definición de propuestas que corrijan eso.
–Sin embargo, para muchos, un gran éxito de la Concertación es la administración del modelo.
–Ese es un punto central, la DC ha sido Gobierno y tiene una capacidad de defender lo hecho y, por el otro lado, tener claridad para identificar los aspectos negativos, por ejemplo las desigualdades económicas y sociales. Pero eso no implica cuestionar el modelo porque, dejándose de cosas, es muy distinto al que existía durante Pinochet, es una injusticia tremenda no reconocer los enormes cambios que se han hecho.
–¿Es distinto o se está perfeccionándolo?
–Con el criterio del perfeccionamiento vamos a rendirle tributo a los Chicago Boys. Yo creo que hay correcciones de fondo.
–¿Y por qué esas correcciones gruesas se hacen imperceptibles?
–Es una buena pregunta. Yo creo que es por el manejo tecnocrático, encerrado entre cuatro paredes, que tienen los equipos económicos. –¿Existe riesgo de cisma o es un bluff de Zaldívar para ganar protagonismo? Él no fue uno de los más entusiastas con la idea de la DC dentro de la Concertación.
–Eso pasó hace tanto tiempo. Los dirigentes en primer lugar tienen que deberse a sus partidos, y si hay una tensión entre esos intereses y los de la coalición, deben tomar opciones. Adolfo Zaldívar ha privilegiado los intereses del partido, pero se ha mantenido en la Concertación, fue presidente de la DC y no hizo nada por sacarla de ahí.
–¿Cuál es problema en la DC, entonces?
–Tiene un déficit de liderazgo, no hay una figura clara y potente que sea seguida por todos, como pasó con Michelle Bachelet en el PS. El (ex) Presidente Frei Ruiz-Tagle tiene un peso tremendo y sin duda que Patricio Aylwin, pero él está alejado de la política diaria. La DC tiene que concordar entre todos sus barones un cuadro de convivencia civilizado que beneficie al partido.
–¿No es claro el liderazgo de Soledad Alvear, se podría decir?
–No es un tema de liderazgo intrapartidario, tiene que tenerlo más allá de la DC, que convoque a más gente que los democratacristianos, y eso ella no lo tiene. Recuerde que Bachelet le ganó con holgura.
–¿Su liderazgo se desgasta por el conflicto interno?
–Bueno, los diputados se lo están cuestionando. Ella va a tener que poner orden cuando vuelva de vacaciones.
–¿Ve a Alvear como candidata de la Concertación?
–No, no la veo como candidata.
–¿Por qué?
–Para ganar elecciones hay que tener cierto carisma, y con eso se nace. Eso se vio en la disputa con Michelle Bachelet y antes también. En un país donde los partidos han perdido fuerza y se privilegia la personalización de la política, la norteamericanización de la política para debilitar a los partidos, se da un escenario perverso, conservador, que favorece cierto tipo de acción política.
–¿Ciertos tipos de liderazgo?
–Claro, liderazgos en que los medios de comunicación en campañas mediáticas son muy decisivos; en ese cuadro pocas personas pueden desenvolverse, y yo a ella no la veo en eso.
–Sin embargo, en las encuestas, que son parte de la norteamericanización de la política, ella aparece bien evaluada.
–Sí, ¿pero cuánto tiempo va a permanecer así siendo presidenta de la DC y enfrentando una disidencia interna tan odiosa? Lo que pasaba con Adolfo Zaldívar puede pasar con ella: ser presidente de partido tiene una connotación que la reduce en su capacidad de convocatoria nacional, eso le pasó a Foxley el ’94. Por otro lado, ella tiene muy buen ascendiente en el electorado del bloque PS-PPD, es hasta mejor evaluada que entre los propios votantes DC, pero llega a un punto en que se enfrenta a una derecha como Piñera, como Longueira, y un bloque de izquierda que puede tener a Insulza… Es un cuadro súper complicado y ahí no sé cómo se mantendría, porque ella nunca ha participado en elecciones.
–¿No considera la senatorial por Santiago?
–No, porque ella era candidata presidencial y se baja para ser senadora por Santiago. No es lo mismo.